Conforme pasan los años, voy viviendo experiencias y mirando el mundo con mis ojos sensibles de mujer soñadora.
Unos ojos que a pesar de ver mucho negro, son capaces de dibujar arco iris.
Cuando se es capaz de salir del fango, se es capaz de todo.
No confío en la clase política que nos quiere convencer de que las cosas no pueden ser de otra manera.
No confío en este sistema capitalista que antepone los intereses económicos de unos pocos para perpetuar sus riquezas.
No confío en esta forma de organización que solo premia a los que siguen haciendo “lo que hay que hacer”, y a los que dicen “lo que hay que decir”.
No confío en esta sociedad machista donde choco una y otra vez, con personas que amparan su seguridad en prejuicios y minusvaloran mi opinión y mi trabajo.
Cada vez confío más en mi misma, en mis capacidades. Y en algunas personas.
Conforme pasan los años y voy viviendo experiencias, me voy reafirmando en mis ideas de autogestión e independencia. La solución a todo lo que estamos viviendo creo que está en nuestras manos. Es momento de no dejar para mañana lo que puedas hacer hoy.
Salud para llevarla a cabo.
Y Amor para que el camino sea llevadero.
¿Qué opinas?