Otro aspecto a tener en cuenta bajo este título y que antes he optado por no dar importancia, es el tema de la organicidad en el más puro sentido biológico.
Es decir, el ser conscientes de tantísimos factores que a o largo de nuestra vida pueden alterar nuestro comportamieto sexual, como son las enfermedades o la ingesta de medicaciones.
Tener siempre presente, que la sexualidad es una parte del ser humano que nos acompaña toda la vida y que por lo tanto va cambiando a lo largo de los años, tanto en hombres como en mujeres.
Una mala comunicación con nuestra pareja también puede hacer que un hecho concreto y puntual se cronifique. Un ejemplo típico, el marido cansado que no tiene una erección. Algo puntual por cansancio o stres, si la pareja no tiene una actitud comprensiva, puede hacer que ese hombre a la próxima vez vaya con temor a la hora de tener relaciones sexuales, y las evite, o se obsesione con la erección produciendo el efecto contrario…
Muchos factores que deben darnos la voz de alarma cuando a nosotros o a nuestra pareja nos crea malestar o frustración.
16-2-2022
Cuando el mecanismo de la sexualidad presenta alteraciones, nos introducimos en el mundo de las disfunciones sexuales.
Lo más importante en las disfunciones sexuales no es la organicidad, sino el desconocimiento por parte de la persona de sus propias posibilidades y recursos.
Ees decir, las disfunciones sexuales deben en gran parte su existencia a la falta de un correcto aprendizaje sexual.
Sin una educación sexual adecuada estamos en un aprendizaje de calle donde erramos dos veces por cada vez que acertamos.
Las disfunciones sexuales son inherentes a la misma imperfección del ser humano.
Pero, cuanto mejor conozcamos nuestras formas de comportamiento sexual, más fácil nos resultará modificar las alteraciones existentes.
También tener en cuenta, que la sexualidad normalmente es una vivencia compartida con otra persona.
El papel de la pareja en la relación, es fundamental 😉
Disfunciones sexuales
En relación con esto, decir que antiguamente se dividía la respuesta sexual humana en cuatro fases: Excitación, Meseta, Orgasmo y Resolución.
Teorías más recientes han añadido una fase más, la del Deseo; para mí, la más importante.
¿Cuándo se puede decir que una persona es inapetente sexual?
Todas las alteraciones se consideran disfunción, si la persona (o su pareja) se siente insatisfecha en sus relaciones.
Las causas de la inapetencia sexual se pueden clasificar en causas médicas (enfermedad crónica, dolor, fármacos…), emocionales (depresión, estrés, problemas…) y causas de un aprendizaje deficiente (inhibición sociocultural, ignorancia…).
Es una minoría la de casos de inapetencia con base médica; la mayor parte de las causas de inapetencia sexual caen en las dos últimas categorías.
Lo primero pues sería descartar el problema médico; y si hay componentes psicológicos que contribuyen a la falta de deseo, tratarlos con un/a profesional que asesore a la pareja.
En los casos de deficiente aprendizaje sexual, estaría indicada la reeducación de la persona en el campo sexual: desafiando mitos culturales» a las mujeres buenas no les gusta el sexo»… y superar la falta de orientación sexual con información didáctica sobre sexualidad.
1-2-2015
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